Sólo hay un rincón en el universo que a buen puerto puedes llegar... ése eres Tú

domingo, 19 de mayo de 2013

NUESTRO PODER CREADOR


Lo primero es Crear desde el SER. Empezar de nuevo de cero...
La energía del Ser Creador está en nosotros...


La creación consciente no se trata de crear cosas para satisfacer las necesidades nuestras insatisfechas y me refiero a se tipo de necesidades  que parten del miedo, de la falta de valoración , de la necesidad de aceptación o integración social o familiar.  No..... no se trata de eso.  Cuando vemos que otros son capaces de crear  y manifestar este tipo de cosas, lo mejor que podemos hacer en vez de sentirnos envidiosos y decepcionados por lo que a nosotros aun no nos llega , es  simplemente  alegrarnos y reconocer la capacidad de creación que todos los seres tenemos y  entender que todo tiene un propósito divino en la vida de cada uno y que esto a veces sencillamente se escapa de nuestro entendimiento pues no conocemos la historia completa.
 La creación consciente realmente trata sobre nuestro propio proceso de vida y de despertar!!! y eventualmente nos va  llevando por nuestro camino de ascensión.
Hasta unificar conscientemente los deseos de la personalidad con los de nuestro SER CREADOR,  nuestro  Dios /a.
No se crea desde nuestra mente pensamiento, o desde nuestra emoción, se crea desde nuestra frecuencia. Y nuestra frecuencia lo incluye todo.
Tu pensamiento, tu sentimiento,  tu emoción  tu estado físico,  a mayor  frecuencia tu manifestación se hace más ágil y mas rápida.
Tu humanidad esta entrenándose en todos los aspectos... físico mental y emocional `para poder sostener tu energía de Dios /a.  Liberándote de todo lo que te pesa para poder entrar en frecuencia resonante con tu Divinidad y aprende a crear desde tu Divinidad.
Por eso es que a veces funciona y a veces no, por falta de alineamiento  entre todo esto que estamos orquestando Conscientemente y a veces no tan Conscientemente.
A mayor alineamiento mayor  capacidad para dar nuestro siguiente paso evolutivo y activar en nuestro ADN la energía de Dios/a.